LA ESPIRITUALIDAD
Como comenté en mis primeros post, todos tenemos un cuerpo físico, emocional, mental y espiritual. De la armonía entre los cuatro depende nuestra salud, nuestra felicidad, nuestro bienestar en todos los aspectos. Cuando uno se debilita, los otros tres se ven afectados, como las cuatro patas de una mesa. Por eso debemos ser conscientes de ellos y mantenerlos en equilibrio. Hoy nos centraremos en El cuerpo Espiritual.
Se confunde, muchas veces, la espiritualidad con la religiosidad, sin embargo la espiritualidad no tiene nada que ver con ninguna religión o creencia. Tu espiritualidad es tu esencia, es la capacidad de amar, de sentir compasión por los demás, de sentir empatía, de conectar con tu intuición, de ser tu mismo lenguaje
¿Por qué es tan importante conectar con tu cuerpo espiritual?
Porque esa parte es quién realmente eres. Tú no eres un hombre, mujer, niño, médica, arquitecto, cocinero, madre, abuelo, joven, viejo… No eres ni tu cuerpo, ni tu mente intelectual, ni tus emociones. Tú eres energía espiritual, todo lo demás lo hemos ido aprendiendo y adquiriendo como nuestro, durante toda la vida a través de la sociedad en la que a cada uno le toca vivir.
En nuestra sociedad actual, como tantas veces repito y todas son pocas, vivimos con prisas para todo y dependemos cada vez más de las tecnologías, por lo que terminamos olvidando nuestra esencia, ¿quiénes somos?
NUESTROS ROLES
Nos comportamos como actores interpretando distintos papeles, todos somos estupendos actores sin saberlo. Dependiendo de la situación en la que nos encontremos actuamos de un modo distinto, interpretando a lo largo del día distintos personajes, puedes levantarte siendo madre, padre, hijo…, para pasar a ser después médico, profesor, alumno…
También, lógicamente, tu comportamiento cambiará a lo largo del día según con quien estés, con tu pareja, con un amigo, con un jefe… Como ves siempre estamos representando un papel dependiendo de la función del momento, pero no nos damos cuenta, pasamos de uno a otro de forma automática.
Entonces ¿cual de todos ellos eres? Madre, abogado, paciente, alumno…?
Ninguno, tu verdadero ser es al que se le ponen todos esos trajes y al que olvidamos al final con tanta representación y terminamos perdiéndonos en todos esos personajes que interpretamos a lo largo del día.
EMPIEZA A DESCUBRIRTE
Una buena forma de empezar a descubrirte, a conectar con tu cuerpo espiritual y reconocer lo que eres, es darte cuenta de lo que no eres. Comenzando a darnos cuenta de lo que no somos, podremos ir quitando capas o personajes para ver al final qué queda, y eso será tu verdadero Ser.
Aunque quizás pueda parecer difícil de entender, os animo a que profundicéis sobre ello y analicéis vuestro interior. Merece la pena encontrarse. Obsérvate en tu día a día, cómo cambia tu forma de comportarte en las distintas situaciones, cómo te sientes en cada una de ellas, qué emociones predominan… conocerte te ayuda a conectar mejor con los demás y a poder controlar mejor tus estados de ánimo.
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DIBUJOS DEL POST
Tengo que dar las gracias a Almasu Awen por sus dibujos, si quieres ver mas, puedes hacerlo en el siguiente enlace:
